«La conferencia en Kazajstán, organizada por Rusia, Irán y Turquía es una posibilidad de formar una nueva plataforma para una solución política en la guerra de muchos años en Siria», — comentó para News Front el evento, Dragan Trifkovic, Director del Centro de los estudios geoestratégicos de Belgrado.
Según el político serbio, el evento se lleva a cabo, no sólo en el contexto de laas acciones militares, sino también en una nueva situación geopolítica.
» Gracias a la ayuda militar rusa, el ejercito sirio logró cambiar el curso de la guerra. Aparte de que en los últimos meses, la situación ha cambiado en los campos de guerra, deben tenerse en cuenta también los cambios en materia de política exterior. El gobierno de Obama era un fuerte apoyo al Frente-An-Nusra y otros grupos terroristas en Siria. Trump durante la carrera presidencial, dijo sobre la lucha conjunta de Rusia contra el terrorismo islámico en Siria. Hay muchos indicios de que la administración de Donald Trump tiene una postura diferente sobre los islamistas en Siria. O, al menos,los Estados Unidos va a estar más involucrado en la solución de los problemas internos, que abre nuevas oportunidades para los que no fue «tratado con amabilidad» por la política exterior de Estados Unidos «.
Sobre la cuestión de la participación de los Estados Unidos en la conferencia en Astana, Washington respondió sin mucho interés, dice Dragan Trifkovic. La razón es , en su opinión, podría ser en el establecimiento de prioridades, así como en la transferencia de la iniciativa sobre el arreglo de la crisis siria en Rusia y otros países de Oriente Medio.
En particular, en este momento, en la nueva realidad, no hay duda de renuncia de Bashar al-Assad, en que insistia el gobierno anterior en los Estados Unidos.
«Las conclusiones de la conferencia se sabrán mañana. Lo más importante es llegar a un cese de las hostilidades y el desarme de los grupos terroristas.
Es importante mencionar que Rusia, además de la ayuda militar, ha proporcionado la ayuda humanitaria a Siria. Este país no lo recibio más de nadie. La conferencia en Astana es una nueva y seria oportunidad para detener el derramamiento de sangre en Siria «.